Niega Luege Tamargo responsabilidades sobre inundaciones en Valle de México.

Por Araceli Ramírez

• Indicó el funcionario que sumados a los efectos del cambio climático, existió irresponsabilidad en los gobiernos anteriores por no crear la infraestructura adecuada acorde al crecimiento urbano.

• Necesaria inversión de 150 millones de pesos para resolver problemas de inundaciones en el Valle de México.

México.- El director de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), José Luis Luege Tamargo, aseguró que los problemas derivados de las fuertes precipitaciones que se han registrado en los últimos tiempos en el Valle de México no son un asunto en el que se pueda responsabilizar a alguien en lo personal, sino más bien, corresponden a la falta de planeación del crecimiento urbano que se ha registrado por más de 30 años.

Al comparecer ante la Tercera Comisión de la Permanente del Congreso, el funcionario indicó que las inundaciones en el valle de México han sido causadas por lluvias atípicas y hechos fortuitos de la naturaleza, cuyas responsabilidades rebasan la capacidad de funcionarios e instituciones.

Agregó que en infraestructura hidráulica se han invertido 53 mil 809 millones de pesos para hacer frente a este tipo de problemas en las zonas urbanas al área metropolitana del Valle de México, pero que tan sólo para resolver tal situación se requiere un monto de 150 mil millones de pesos.

Luege Tamargo, señaló que los gobiernos de los estados y municipios deben invertir más en la prevención de los efectos de los fenómenos meteorológicos. Añadió que el efecto del cambio climático se debe tomar en cuenta para todos los análisis hidrometeorológicos ya que si bien es cierto se padecen problemas generados por los torrentes de lluvia, también incrementará la intensidad de sequías y huracanes.

A quienes le atribuyen responsabilidad a la Conagua, expuso que la tormenta tropical Arlene provocó la lluvia más fuerte en la zona oriente del Valle de México, lo que puso a prueba todos los sistemas de desagüe, demostrando que existen hechos fortuitos, que superan la capacidad de un funcionario, de una institución, de una ciudad o del propio gobierno federal.