*El ciudadano Emilio Ortega Mosso, aseguró que después de 17 años de trabajar para la referida empresa, y por sufrir un accidente de trabajo al ser asaltado y golpeado por ladrones en el transporte público, Sayer Lack Mexicana sólo le ofreció pagar una pensión parcial del 5 por ciento, lo que representa 170 pesos al mes.
NICOLÁS ROMERO, Méx.- La empresa Sayer Lack Mexicana S.A. de C.V. y médicos del Instituto Mexicano del Seguro Social están en contubernio contra la clase trabajadora, pues entre ambas instituciones ponen trabas legales para evitar pagar indemnización por accidente de trabajo a obreros.
Así lo denunció el ciudadano Emilio Ortega Mosso, quien aseguró que después de 17 años de trabajar para la referida empresa, después de sufrir un accidente de trabajo al ser asaltado y golpeado por ladrones en el transporte público, Sayer Lack Mexicana sólo le ofreció pagar una pensión parcial del 5 por ciento, lo que representa 170 pesos al mes.
El trabajador aseguró que el tabulador de pensiones que tiene la empresa indica que por accidente de trabajo –la agresión la recibió camino de su casa al trabajo- le deben de pagar una pensión mínima del 20 por ciento de su salario, cosa que no ocurrió.
“Hace más de un año (abril de 2013) que sufrí un asalto en el transporte público y cuyos golpes me afectaron la vista al grado que he perdido visibilidad, como lo han comprobado los médicos del IMSS que me atendieron, pero la empresa no me pagó la pensión que merezco, y peor aún me orilló a firmar un documento en blanco que después me enteré era mi renuncia y a cambio sólo me dieron 65 mil pesos por 17 años de trabajo”, afirmó.
El obrero nicolásromerense afirmó que el médico del IMSS Raúl Alatriste Vargas lo maltrató en la atención que recibió en esa institución púbica de salud, ya que el galeno se negaba a otorgar el documento de pensión por accidente de trabajo y retrasó la entrega del documento de incapacidad laboral –que meses después sí entregó el IMSS vía médicos del Hospital La Raza-.
Quien fuera obrero montagarguista y almacenista de la empresa Sayer Lack Mexicana por 17 años, responsabilizó a María Teresa Colín Álvarez –a quien identifica como representante legal de la empresa- de hacerle firmar un documento en blanco –de manera alevosa e ilegal- a cambio de un finiquito de 65 mil pesos, documento que después se enteró fue su renuncia y por la cual hoy en día lo mantiene desempleado y con altas deudas económicas debido a la inversión en medicamentos y atención médica que requiere a causa de la golpiza que recibió durante el atraco al transporte público en el que viajaba con rumbo a su trabajo.
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