Discriminación laboral, familiar y violencia acaba con la vida de comunidad LGBT

*El rechazo familiar, discriminación laboral y violencia que enfrentan las personas que integran la comunidad Lésbico, Gay, Bisexual y Transgénero está relacionado con un incremento hasta de ocho veces en los intentos de suicidio en dicho grupo, afirma PRD-Edomex.

 

*Aunque en México se elevó a rango constitucional la prohibición de la discriminación, la mayoría de los estados no ha tipificado los crímenes de odio, por lo que urge legislar sobre el tema y garantizar el respeto a la diversidad sexual en el país.

VALLE DE MÉXICO.- La práctica de la homosexualidad es una de las reafirmaciones de la libertad, por lo que urgen leyes y doctrinas sociales en el estado de México que promuevan el respeto, la equidad y la justicia para la comunidad Lésbico, Gay, Bisexual y Transgénero (LGBT).

 

Así lo declaró Lucy Cortés Cornejo, décimo cuarta regidora de Naucalpan, en el marco de las celebraciones que realizó el pasado fin de semana la Comunidad Lésbico, Gay, Bisexual, Transgénero de Naucalpan para elegir a su rey y reina mediante un certamen realizado en el Teatro Bicentenario de esta demarcación.

 

Y agregó que las personas con una orientación sexual diferente a la heterosexual tienen todos los derechos establecidos por las leyes mexicanas y los tratados internacionales como el del trabajo y el de disfrutar de una vida libre de violencia.

 

Cortés Cornejo declaró que es necesario promover la integración y aceptación de la comunidad LGBT desde el seno familiar y que desde ahí se inculque a las nuevas generaciones sobre la libertad que cada ser humano debe tener para ejercer su sexualidad de manera responsable.

 

Señaló que está comprobado que el rechazo en el hogar aumenta los intentos de suicidio en ese sector de la población, y citó a la especialista Catalin Ryan, directora del Proyecto de Aceptación Familiar de la Universidad de San Francisco, California, cuyos estudios indican que el gran rechazo familiar a los hijos LGBT está relacionado con un incremento hasta de ocho veces en los intentos de suicidio en dicho grupo, seis veces en índices de depresión, 3.5 en abuso de drogas y 3.5 veces más en el ejercicio de prácticas sexuales de riesgo.

 

Lucy Cortés reconoció que el mayor problema al que se enfrentan los grupos de diversidad sexual es la discriminación laboral, así como el desprecio de otros sectores de la sociedad y urgió a priorizar la necesidad de privilegiar la aceptación de aquellos que son distintos y fomentar los valores de respeto, equidad, justicia e igualdad, como piezas fundamentales para tener una sociedad más armónica.

 

Mencionó que en el ámbito internacional la legislación de 78 países criminaliza las relaciones homosexuales, y en Irán, Mauritana, Arabia Saudita, Sudán y Yemen están castigadas con la pena de muerte, según la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersexuales (ILGA). De 113 países donde la homosexualidad es legal, 55 tienen leyes en contra de la discriminación en el lugar del trabajo y, en 10 de ellos, los homosexuales tienen derechos equitativos para casarse, de acuerdo con ILGA, dijo.

Cortés expuso que en el texto Informe sobre Homofobia Patrocinada por el Estado, ILGA señala que en los países de América Latina el principal problema que enfrentan los homosexuales es la violencia. La mayoría de los países de la región no cuenta con una legislación que prohíba la homofobia, según la Asociación Internacional.

 

Declaró que en México, aunque se elevó a rango constitucional la prohibición de la discriminación, la mayoría de los estados no ha tipificado los crímenes de odio, lo anterior de acuerdo al Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred).

 

Otro problema recurrente que enfrenta este sector de la población es el desprecio en todas sus formas, incluso más que la violación a los derechos fundamentales, lo que ha provocado que se tomen actitudes que van desde la broma, el insulto, hasta llegar a la violencia física y psicológica, por ello llamó a la población a participar activamente en fortalecer la equidad y el respeto a la diversidad.

 

Dijo estar convencida que es con la educación y con la ley, como se podrá disminuir esa problemática, por lo que recordó que ya se han dado avances en el camino para que se legisle sobre el particular, aunque –reconoció- falta mucho por hacer para que en el Estado de México se tenga una legislación similar a la que existe en el Distrito Federal sobre este tema. Este tipo de eventos que promueven la inclusión, la aceptación, la pluralidad, el derecho a ser, deben de darse con mayor regularidad en las distintas regiones de la entidad mexiquense y qué mejor si en ellos participan los familiares y amigos de los integrantes de la comunidad LGBT, concluyó.