#LaColumnaMx

El país está en crisis…

 

Los hechos de violencia que ejerce el crimen organizado y las instituciones de gobierno contra los estudiantes son permanentes y han denigrado la imagen del país a nivel internacional…

 

En esta zona del estado de México, en Cuautitlán Izcalli, Atizapán de Zaragoza y Tepotzotlán, estudiantes se han sumado al reclamo de #JusticiaParaAyotzinapa y de #RenunciaEnriquePeñaNieto además de exigir el cese a la violencia oficial contra los jóvenes…

 

En ese contexto, es de resaltar el llamado a la unidad y paz social que tanto el gobernador Eruviel Ávila como los Alcaldes David Sánchez Guevara, Karim Carvallo y Juan José Mendoza Zupa han hecho en sus respectivos municipios… Pero los responsables de gobiernos no pueden quedarse en un simple llamado social, deben utilizar el erario público para impulsar programas y acciones gubernamentales que impulsen la cultura de paz y no violencia, el respeto a los derechos humanos y la libertad de expresión…

 

Pero también tienen que utilizar el erario público para impulsar condiciones sociales que reduzcan la delincuencia, agravada por el desempleo…

 

  Por eso es de resaltar los programas de Empleo Temporal impulsados en los municipios de Cuautitlán Izcalli y Naucalpan, donde con cargo al erario público los ciudadanos pintarán edificios de conjuntos urbanos y fachadas de las comunidades, respectivamente, así como las acciones de prevención del delito en escuelas públicas que en Tepotzotlán, Izcalli y Naucalpan se realizan…

 

En este contexto, es lamentable que la ignorancia y falta de compromiso social del Alcalde Pedro Rodríguez Villegas en Atizapán de Zaragoza sea evidente cuando a él fue al primer Edil que la sociedad civil le propuso un programa similar, al pedirle desde principios de año que impulsara un programa de empleo temporal donde la sociedad pusiera la mano de obra en la repavimentación de las vialidades, pero el edil panista simplemente no escucho la voz ciudadana…

 

En este panorama de desempleo, falta de comunicación entre la sociedad y los gobernantes, se debe respetar la libertad de expresión y la protesta social, pues criminalizar la protesta de los ciudadanos nos llevará a un régimen totalitario donde las libertades civiles y derechos humanos, principal exigencia de los jóvenes en la actualidad, será una utopía triste en un país en caos…